LA CANOA QUE NAVEGA EN EL OCÉANO INFINITO O SUPAY Y AMAR
LA CANOA
QUE NAVEGA EN EL OCÉANO INFINITO
O
SUPAY Y AMAR
GatoQ´Ladra
2019
Prólogo
LA CANOA QUE NAVEGA EN EL OCÉANO
INFINITO
O
SUPAY Y AMAR
“Lo que se realiza por amor, sucede
siempre más allá del bien y del mal”
Friedrich Nietzsche
Esta pieza teatral pos moderna contiene como elementos
conceptuales, la dualidad más absurda, el bien y el mal y sus aspectos y
equilibrios abordados desde lo teatral. Plasmando en la narración diferentes
simbologías y acciones que crea un conducto de imágenes surrealistas que
emanan al inconsciente, al mundo de los sueños. LA CANOA QUE NAVEGA EN EL
OCÉANO INFINITO O SUPAY Y AMAR es una colmena onírica que presenta al
lector/espectador una ilusión absurda e hipotética de un mundo paralelo de dos
dioses que representan lo positivo y lo negativo, el bien y el mal, la luz y
la oscuridad, la luna y el sol, el día y la noche. SUPAY/LA MUJER es la
velocidad, el fuego y lo denso, la muerte es su esencia nata. AMAR/EL HOMBRE
es la calma, el agua, y lo suave, la vida es su esencia nata; ambos contienen
una parte del otro, lo intuyen pero no lo aceptan, por ende inventan un falso
equilibrio que convierte su existencia como una condena, atrapados en una
canoa sin poder tocarse y amándose; dicha canoa representa sus límites, sus
muertes y vida.
“El bien y el mal no existen si no hay
libertad para desobedecer.”
Erich Fromm
Erich Fromm
¿Qué es el bien?, ¿Qué es el mal?, ¿Qué es lo bueno?,
¿Qué es lo malo? Los prejuicios, ataduras y dualidades humanas nos distraen de
la verdadera naturaleza humana, nos negamos a entender el universo como un
todo y a la ves la nada, todo debe tener un nombre, todo debe ser de una sola
manera, sabiendo que la esencia vital de la existencia es la danza de la unión
y el caos, y que poco a poco ha ido convirtiéndose en una carrera aún más
absurda; no nos conformamos en entender la complejidad humana, cuando estamos
imponiendo conceptos, ideales, moralidad que nos aleja de lo que podemos
considerar como la verdadera escucha de lo que nos rodea. La vida es el
proceso de descubrir y desaprender, de experimentar para trasmitir, pero de
igual forma es una telaraña de mentiras que ha venido expandiéndose en el
correr de los tiempos, es la lucha infinita del ego, del amor, del olvido y de
la casualidad. Un león no es malo por comerse una cebra, está alimentándose,
es la naturaleza humana, la pirámide alimenticia. Un ave no es buena por
cuidar sus huevos, es instinto de descendencia. Los seres humanos debemos
entender que hay un puto que conecta nuestra animalidad con nuestro raciocinio
y emocionalidad, que podemos llamar RELATIVIDAD; no todo es de un solo color,
hay circunstancias dadas, historia y presente.
PERSONAJES
SUPAY
Índice
ACTO
UNO
BIEN
Escena Uno…………………...….Supay.
Escena Dos……………………….Amar.
Escena Tres……………………...Canoa.
MAL
Escena Cuatro…………………...Océano.
Escena Cinco……………………. Infinito.
Escena Seis………………………Epifanía
TODO
Escena Siete…………………….Aguas rojas
Escena Ocho.............................El centro del océano.
Escena Nueve.…….…………….………Libertad
ACTO CUATRO
VACÍO
Escena Diez……………………………..Salta
Escena Once…………………………..Cascada.
ACTO UNO
BIEN
Escena uno
Supay
Supay:
Seamos uno
Amar:
No.
Escena
Dos
Amar
Supay:
Saltó al océano infinito silencioso y
penetrante. Burbujas salen de mi boca como abejas del panal, veo subir a la
superficie aquellas burbujas de colores; es hermoso como estallan, se
desvanecen mientras desciendo al infierno húmedo y oscuro. Mis ojos dejan poco
a poco de distinguir la luz de las tinieblas llevándome a lo antaño,
mostrándome imágenes inconclusas de mis vidas pasadas, hasta llegar al
instante en que saltó al océano infinito silencioso y penetrante.
Amar:
Saltó al agua y el cielo se termina
de estremecer, las nubes, las estrellas, la luna, el sol, el universo y el
infinito en todo su esplendor. Pero era lanzarme e intentar salvarla o ver
sentado como el paisaje se derrumba a mi lado. Logro verla, es tan pequeña
como un feto y tan lejos como un sueño; nado lo más fuerte que puedo, mientras
trozos de cometas y asteroides pasan por mi costado como balas, entre más
desciendo más lejos la veo, entre más me acerco más intensa es la presión en
mis huesos. La luna estrella su inmensidad en las aguas, causando oleadas y
absorciones imparables llevándose todo a su paso, mi boca se abre dejando
salir burbujas que parecen medusas, nos acompañan a la nada.
Escena Tres
Canoa
Supay
¿Porque no me salvaste?
Amar:
Lo intente.
Supay:
Siempre lo intentas
Amar:
Quería dejarte morir sola, pero
sabes lo importante que eres.
Supay:
Me arrojó para que vengas por mí, es
la única manera que podría tenerte cerca.
Amar:
¿Cuándo entenderás?
Supay:
Y ¿cuándo lo harás tú?
Amar:
Siempre será así, ¿verdad? Quédate ahí, en tu lado y yo aquí,
en mi lado mientras que todo es.
Supay:
¿Porque temerle al caos?
Amar:
¿Porque temerle a la inmovilidad?
Supay:
Tengo hambre.
Amar:
Pesca.
Supay:
Tengo sed.
Amar:
Bebé.
Supay:
Tengo sueño.
Amar:
Duerme. Cierras los ojos, pareces
muerta, pero estás más viva que yo. Tus enormes pestañas siempre me han
servido para pescar, te las robo cuando duermes, sin que te des cuenta, porque
no me darías ni una si estuvieras despierta.
Te robo las pestañas, con la punta de mis uñas las cosecho, con todo el
cuidado, como el beso de un bebé; ya perdí la cuenta de cuántas veces te las
he robado, como también cuántas veces hemos muerto, de cuantas veces he
intentado rescatarte, de cuantas veces te has lanzado al agua por tus ansias
incontrolables de llamar mi atención. Eres como un animal, como una bestia
marina que tiene hambre de mí, como yo tengo hambre de ti; el deseo que
sentimos el uno por el otro, es nuestra maldición y bendición, es lo que nos
une y lo que nos divide.
MAL
Escena Cuatro
Océano
Amar:
¿Qué heces?
Supay:
Tengo calor.
Amar:
¿Porque haces todo más difícil?
Supay:
Porque tú lo haces tan fácil. Quiero nadar.
Amar:
Ni lo pienses.
Supay:
Tú no me mandas.
Amar:
No vayas a dejar de tocar la bendita
canoa.
Supay:
No dejaré de tocar la maldita canoa.
Amar:
¿Qué haces?
Supay:
Quiero hacer el amor con un delfín
rosado, ¿Te dan celos? estoy pescando idiota, tengo hambre; muero del hambre,
tanto que se me caen las pestañas.
Amar:
No tienes necesidad de pescar,
pesqué suficiente para los dos mientras dormías.
Supay:
Nunca has sabido mentir, ¡Pescaste
con mis pestañas! Siempre lo has hecho, por eso siempre pescas cuando duermo.
¿Porque no usas las tuyas?
Amar:
Algunas veces uso las mías, pero las
tuyas... son más fuertes y además te crecen rápido.
Supay:
Cuando te lo propones puedes
lastimar sin tocar y cuando me tocas me robas, me mientes.
Amar:
Has enloquecido.
Supay:
¿Quieres mis pestañas?, te las daré todas.
Amar:
Y con sus dos manos, arranca todas
sus pestañas de un solo tirón, y las arroja al océano infinito mientras su cuello
se retuerce en círculos y sus ojos se colocan rojos, las pestañas tocan el
agua, y de ellas se emana un líquido rojo parecido a la muerte, en la
superficie todas las criaturas salen a la vista; son tantas que apenas y la
barca puede navegar, ¿Y ahora qué beberemos y comeremos?
Supay:
¿Ahora cómo voy a dormir?
Escena Cinco
Infinito
Amar:
Libertad sobrevuela de tal manera
las aguas que los cadáveres bestiales se abren a los lados, creando así la
especie de un río infinito, sin curvas, totalmente lineal que desemboca en la
cascada.
Supay:
Amar llega al extremo de arrancar
todas sus pestañas, amarrarlas entre ellas para crear una red, con la que
intenta atrapar algo vivo tantas veces como su moral se lo permite; pero lo
único que arrastra a la canoa son peces muertos y contaminados de líquido
rojo; ahora no podrá dormir. La canoa nos conduce por un cementerio de
ballenas y calamares gigantes que flotan congelados en el tiempo en luchas de
vida y muerte, donde distintos peces de colores jurásicos salen a la vista
flotando de perfil.
Amar:
Debe llover
Supay:
Sabes que no lloverá, aún no es
tiempo de lluvia. ¿No sería mejor comenzar de nuevo?
Amar:
¿Porque lo haces ver tan fácil?
Supay:
Estallemos en miles de pedazos.
Amar:
Tu naturaleza es destruir y la mía
conservar.
Supay:
Porque no regeneras el océano junto con sus
criaturas.
Amar:
Porque dar no es tan fácil como
quitar.
Supay:
Pero si me puedes quitar las
pestañas, ¿verdad?
Amar:
Eso es diferente, Sobrevivimos.
Supay:
Y ahora sobreviviremos en las aguas de los polvos de estrellas.
Amar:
Mientras llegan las lluvias y limpian
nuestras aguas.
Supay:
¿Y las criaturas?
Amar:
Cuando bebamos las resucitaremos.
Supay:
¿Y si hacemos llover? viste cómo
aparecen las nubes cuando nos intentamos tocar.
Amar:
Es muy arriesgado.
Supay:
Arriésgate. Piénsalo, si nos amamos con la suficiente pasión
y concentración, puede que llueva tanto que se limpien las aguas.
Amar:
Creo que es otro de tus intentos
para satisfacer tus deseos serpiente.
Supay:
Quizás. ¿Tienes otra idea ratón?
Amar:
Está bien, Toquémonos los dedos.
Supay:
No es suficiente.
Amar:
Otro dedo.
Supay:
No es suficiente.
Amar:
Besémonos
Supay:
No es suficiente.
Amar
Unamos nuestros universos.
Supay:
No es suficiente
Amar:
Los vientos soplan, Las aguas
rojizas se estremecen, la canoa se mueve sin ninguna dirección fija, gotas de
lluvias gruesas y ásperas; pronto estamos debajo de una cortina de cristal,
nuestros cuerpos se mojan, besos húmedos, tacto empapado, sentidos derretidos.
La misma sensación de la última vez estalla desde mis manos, mis dedos y brazos se rajan y emanan una luz
amarrilla con escarchas negras.
Supay:
¿Qué pasa?
Amar:
No te das cuenta que casi
explotamos.
Supay:
Si
.
Amar:
Mira mis manos, se estaban
desfragmentando.
Supay:
Si, la mías también, pero ¿y qué?,
¿y si debe pasar?
Amar:
¿Y si no?
Supay:
¿Y si no debemos de estar en esta
canoa?
Amar:
Supay
Libertad.
Amar.
No, Libertad es como nosotros, solo
que su mundo son los cielos.
Supay:
Tanto el de los polvos de estrellas
como este.
Amar:
Si en algún momento tuvimos un dios,
ahora está muerto.
Se desangra en las aguas, en el
cielo, en los animales y en nosotros.
Supay:
Y ¿si no existimos?
Amar:
Y ¿si somos un
sueño colectivo?
ESCENA
SEIS
EPIFANIA
Supay:
Nosotros somos el todo y la nada.
Amar:
Después del chasquido de las grandes
rocas, del relámpago mayor; sin ninguna explicación nos encontramos frente a
frente sosteniéndose las miradas, tratando de descifrarlos.
Supay
Recuerdo como escuchábamos las
aguas, el cielo, las nubes y las estrellas, recuerdo cuando intentamos
tocarnos por primera vez.
Amar
Recuerdo la epifanía
Supay
Recuerdo la epifanía
Amar
No
busquen respuestas
Supay
Solo sean
Amar
No busquen significados porque no los encontraran
Supay
Más allá de estas aguas hay polvos de estrellas que
evolucionan gracias a nosotros.
Amar
Esos polvos de estrellas se irán
convirtiendo en un árbol cósmico-biológico, hasta ser la sistematización de la
complejidad del absurdo total en todo su esplendor.
Supay
Somos parte de
ellos tanto como ellos de nosotros.
Amar
Llegará el tiempo en que nos
uniremos de tal manera a los polvos de estrellas, que hablar de nosotros y de
ellos será lo mismo.
Supay
En el proceso moriremos varias veces
y naceremos muchas más, mientras que encontramos el equilibrio.
Amar
No teman, pero tengan en cuenta que esta
canoa no es eterna.
Supay
Estaremos para ustedes, porque
ustedes son los polvos de estrellas que brillan pero no todo el tiempo, cuando
más lo necesitan.
Amar
El gran momento, el instante en que nada se
repetirá, en que los universos no se restaurarán más y el tiempo correrá sin
devolverse y sin parar.
Escena seis
Aguas rojas
Amar:
No dejo de verme las manos, mientras que
lucero no deja de masturbarse; así se distrae del hambre, la sed y el sueño,
yo prefiero respirar, pero los cuerpos de las criaturas marinas se descomponen
y emanan un fétido aroma; causando que nuestro cielo cada vez se acerca a
confundirse con el rojo del océano.
Supay:
El tiempo
pasa, las lluvias no llegan, libertad no ha vuelto y la cascada que nos
llevará a las aguas de los polvos de estrellas no aparece.
Amar:
Seguimos vivos, pero el rostro de Supay está
estirado, sus muslos han adelgazado, sus brazos se confunden con sus piernas,
su cabello negro deja de brillar, y yo, yo soy un muerto en vida.
Supay:
Volteemos el océano como una sábana.
Amar:
Estamos muy débiles
.
Supay:
Si nosotros
nos volteamos, voltearemos las aguas. Balancéate conmigo, de un lado |para el
otro, vamos intentémoslo, volteemos la canoa, pongámonos de cabeza ¿que
podríamos perder? vamos tambaleante.
Amar:
Detente.
Supay:
Hazlo Amar.
Amar:
El sol te ha tostado
la poca razón que te quedaba Supay.
Supay:
Quizás.
Pase lo que pase no sueltes la canoa.
Amar
Esperemos a Libertad.
Supay:
Y tambaleamos
tanto que caímos a las aguas rojas. Suspendidos en el espacio y tiempo
Amar
Aferrados a la
canoa.
Supay:
Observamos el vació
del océano que ahora es rosado.
Amar:
Descendemos a lo
desconocido.
Supay:
Las aguas hierven, los cuerpos
putrefactos de las criaturas marinas se cocinan, los volcanes marinos
estallan. Caemos a un sueño lúcido de
venas cortantes.
ACTO TRES
TODO
Escena Siete.
El Centro del océano
Amar:
Nunca sueltes la canoa.
Supay:
No ves nada.
Amar:
No sueltes la canoa.
Supay:
Algo te toca.
Amar:
No sueltes la canoa.
Supay:
No estás solo.
Amar:
No sueltes la canoa.
Amar:
Es la inmensidad que nos acobija
abruptamente.
Supay:
No sueltes la canoa.
Amar:
Por un momento no existimos, la
oscuridad entra en nuestras venas y todo aquello que no es cuerpo se funde con
el océano.
Supay:
Escuchamos los pensamientos del
otro.
Amar:
Fuego blanco que no quema.
Supay:
El centro del océano.
Amar:
Donde nada es.
Supay:
Y lo es todo a la vez.
Amar:
Debemos seguir, desapareceremos si
nos quedamos aquí
Supay:
No ciento ni hambre ni sed, ni
sueño, hasta mis pestañas volvieron a crecer.
Amar:
Igual yo, pero todo es una ilusión;
si desaparecemos aquí no volveríamos a resucitar y todo acabaría, no habría
regreso.
Supay:
Sin regreso
Amar:
Moriríamos para siempre y con nosotros los
polvos de estrellas.
Supay:
Tal vez eso es lo que debe ser.
Amar:
No se trata de ti, se trata de las
vidas que otorga tu ser.
Supay:
Yo la quito.
Amar:
¿Cuál es la diferencia?
Supay:
No encuentro como comenzar a
caminar.
Amar:
Primero da un paso y después el
otro.
Supay:
No es tan fácil si todas tus vidas
has estado sentada en una canoa.
Amar:
Si nadas puedes caminar, sube la
canoa a tus hombros.
Supay:
Es muy pesada.
Amar:
Todas nuestras vidas están talladas
en ella, ¿si sientes las marcas en sus tablas?, simbolizan cada fin de un
nuevo inicio, cada intento fallido de comenzar de nuevo, entre más se talla,
menos madera, entre más te lanzas al agua por capricho existencial, más
aportas a que se desmantele de una forma poética; cuando algo regresa algo
debe quitarse. En algún tiempo si seguimos fallando en mantenernos vivos,
puede que aparezcamos flotando en una tabla con un hermoso tallado.
ESCENA OCHO
LIBERTAD
Supay:
Ya no quiero seguir.
Amar:
Siempre dices lo que yo nunca diré.
Supay:
Siempre
haces lo que yo nunca are.
Amar:
Descansemos.
Supay:
Quiero descansar para siempre.
Amar:
Respira.
Supay:
Respirar sin amor es como la nada.
Amar:
Ama la nada y lo amaras todo.
Supay:
Te amo a ti.
Amar:
Y yo a ti.
Supay:
Dame un poco de tu eternidad y yo te
daré de la mía.
Amar:
¿Cómo sabes que aquí no pasara nada?
Supay:
Solo lo sé. Si estamos caminando con
la canoa a hombros, también es posible que nos podamos tocar sin que las
grietas doradas aparezcan.
Amar:
No.
Supay:
Amas más a esta prisión.
Amar:
Tú la ves como una prisión, yo la
veo como un hogar.
Supay:
Somos tan diferentes.
Amar:
Diferentes somos. Supay deja caer la
canoa de una manera exorbitante, ¿Qué estás haciendo?, se lanza a mis brazos,
entierra sus uñas en mi espalda; no me duele porque me alivian sus besos en mi
boca, la tomó del cabello, su cabeza hacia atrás, comienzo a besarle el cuello
y la dejó caer. Pudiste partirla.
Supay:
Me encantaría tener esa
actitud, vulgar pero decente, versátil
y al mismo tiempo ignorante y demente con una pizca de realismo, daría
cualquier cosa por tenerla, porque muerdo y no como, ni lavo ni presto la
batea, siento un vacío en mi corazón; una vida complicada, pero es mi vida,
que daría yo por tener la vida de los demás, pero sin soltar la mía, esa vida
caóticamente hermosa que solo tengo yo.
Amar:
De repente una luz penetrante que es
causada por libertad que está en forma de ave desciende de las aguas, se posa
en mi mano y comienza a picotear mis dedos sin dolor alguno; no sabía que
podía llegar hasta aquí. Sin previo aviso Supay la agarra de un ala, mientras
que le tengo la otra; todo se detiene, le arrancamos las alas a Libertad que
se alarga, saca colmillos y se cubre de piel escamosa, escarba un agujero en
el centro del océano y entra en él. La única criatura que nos acompañaba y que
nos ayudaba en este infierno ya no puede volar y no podrá salir de aquí nunca;
como no podemos matarnos entre nosotros, acabamos con todo lo que nos rodea.
Te odio.
Supay:
Y yo a ti.
Amar:
Ven.
Supay:
¿Me matarás?
Amar:
Aquí no morirías, si no que te
convertirías en otro ser, quiero verte
totalmente muerta; por eso te amare.
Supay:
El amor es más cruel que la muerte.
Estrellamos nuestros cuerpos, volamos, saltamos y danzamos al ritmo de
nuestras pulsaciones que se unifican en un solo tempo.
Amar:
Nos perdemos en la irreverencia de
nuestros movimientos, en el caos de nuestra pasión y vehemencia, en la cúspide
de nuestros deseos.
Supay:
Amar:
Las sensaciones y sentidos nos
encadenan en una secuencia de posiciones corporales que se entrelazan
cuidadosa y fluidamente, como una rutina ya planeada, pero la verdad es que
solo sigo tus gemidos y tú sigues los míos.
ESCENA NUEVE
SALTA
Amar:
Falta poco.
Supay:
No quiero soltarte.
Amar:
No siento mi brazo.
Supay:
Estamos desapareciendo.
Amar:
Corre.
Supay:
No puedo.
Amar:
Falta poco.
Supay:
No quiero soltarte.
Amar:
¡Vamos corre conmigo!
Supay:
Es hora de volver.
Amar:
No voy a soltarte.
Supay:
No siento mi pecho.
Amar:
Estamos desapareciendo.
Supay:
¡Salta!
.
Amar:
Y brincamos tan fuerte como nuestras
fuerzas lo permiten, dejando atrás el vacío y ascendiendo dilatadamente a
nuestra realidad como si la canoa fuese un globo aerostático, ascendemos sin
dejar de vernos a los ojos, como si ambos intentábamos decirnos algo; sea cual
sea que se quiere expresar, nunca se dijo, quedó dando vueltas en nuestros
pensamientos como un pez en una pecera.
ACTO CUATRO
VACÍO
Escena Diez
Cascada
Supay:
En la superficie la canoa flota, con
nuestros cuerpos bronceados por el fuego frío e indoloro del centro del
océano; somos más almas que carne. Dos esqueletos en una canoa cubiertos por
una capa fina de pellejo, que miran el cielo rojo limitándose a respirar el
aire nauseabundo. Algunas veces cerramos los ojos e imaginamos que estamos muertos,
o recordamos cuando estuvimos juntos en ese instante en que nuestros cuerpos
fueron uno solo, para sentirnos vivos.
Amar:
Agua se filtra en la canoa, de mi
lado se descubre una raja en sus pisos. Es verdad, como no podemos destruirnos
entre nosotros, acabamos con todo lo que nos rodea.
Supay:
Todo lo que toco lo destruyo, todo
lo que acaricio se desmorona, acabó todo hasta el fin, soy un punto sin
retorno. Una vez más me pongo en pie y miró las aguas para lanzarme a ellas.
Amar:
¡No Supay!
Supay:
Lo tuyo es la vida, lo mío es la
muerte, yo vivo cuando estoy muriendo, es lo que sé hacer mejor, desfallecer,
derrumbarme, soy adicta a morir ahogada.
Amar:
¡Espera!
Supay:
Y ¿qué esperar?, ¿que la canoa se
termine de hundir?, ¿que nos mate el aire?, ¿morir de sed, de hambre y de
sueño?, ¿Esperar que nos matemos entre nosotros?, ¿esperar que llueva? Sea
cual sea el camino, el fin siempre será
la fría y húmeda muerte. Mi reflejo me llama, me hace señas para que me
acerque a él, me sonríe, me idiotiza, me roba mi mirada, mi atención, no
escucho nada, nada más existe, solo las ganas de arrojarme al vacío. Pensé que
era solo por ti, pero ahora sé que siempre fue por mí.
Amar:
Solo está ahí, de pie, mirando su reflejo,
hipnotizada por las ganas de morir, diciendo incoherencias. Si ama tanto la
muerte, podría llegar a entender que la
muerte es lo que mantiene vivo. Su cuerpo comienza a inclinarse hacia
adelante; la canoa se hunde cada vez más, hacer ondas con sus dedos como un
ritual para entregarse a la muerte. Es adicta a morir ahogada
.
Supay:
Cuanto quisiera que todo fuese un
sueño, pero cada vez todo es más real.
Amar
Nuestros ojos están secos de tanto
mirar el sol.
Supay
La piel se incrusto en los huesos,
nuestros cabellos se cayeron, igual que las uñas, nos pudrimos igual que las
bestias marinas.
Amar:
Con mis últimas fuerzas intenté
acercarme a Supay, el agua se filtra cada vez más rápido como una herida
abierta que filtra sangre, la canoa casi desaparece en su inmensidad.
Supay:
Pero antes que se perdiera, entramos
a aguas turbulentas que nos hace brincar, la fuerza de las aguas nos empuja,
nos empapa, todo para prepararnos para caer al abismo de la cascada tan
infinita como el océano mismo, nuestros cuerpos se suspenden en el aire, nos
miramos mientras que nos alejamos.
Supay:
La tierra tiembla y se quiebra, una
luz cegadora sale disparada de una las grietas, es Libertad que se escapa del
centro del océano; nos acoge, nos une y acompaña en esta caída por los aires,
sin pensar en las consecuencias o en el futuro, en lo que pasara o podría
llegar a suceder.
Amar:
Nos desfragmentamos, los rayos de
luz salen con las escarchas negras, nada importa, que pase lo que ha de pasar.
Supay:
Las grietas se vuelven agujeros, y
los agujeros vacíos y los vacíos aires, hasta que justo antes de tocar el agua
de los polvos de estrellas nos convertimos en el todo y la nada.
Amar:
Somos el tiempo
Supay:
Somos libres
Supay/Amar
Uno con los polvos de estrellas.
FIN DE LA CANOA QUE
NAVEGA EN EL OCEANO INFINITO O SUPAY Y AMAR
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